DOMINGO 6 JUNIO ,2004
Un viajecito la mar de tranquilo. Nos fuimos en avión y es que para ir a Mallorca no se me ocurrió otra forma mejor, además había que aprovecharse de que el billete lo pagaba la empresa. Bueno, el billete y la estancia en el hotel, tuve que pagar un plus por comer allí pero como era buffet merecía la pena. ¿Hay buffet en todos los hoteles? ¿o van por menú?
Llegamos a eso de las 2 de la madrugada, un par de horas de vuelo bastante tranquilo. Era la primera vez que "volaba" y encima no me tocó cerca de la ventanilla y es que al sacar el billete ni me enteré que había que marcar con una "X" el asiento de preferencia. Para la próxima vez ya sabía qué hacer.
Al llegar el director del Mallorca Beach situado en el Arenal, nos estaba esperando. No fue muy amable y estuvo todo el camino a la habitación callándonos y era normal porque nos habíamos tirado todo el trayecto riéndonos de un par de guiris del avión, que por cierto ya venían con ese tono cangrejo que les caracteriza.
Antes de coger el vuelo planeamos que nos íbamos a quedar hasta tarde conversando pero nada doña "soy la juerga padre, la alegría de la huerta" se quedó traspuesta a la media hora de pisar la habitación, yo me quedé pensando en los cinco días que nos quedaban por delante...
LUNES 7 DE JUNIO, 2004
Eran las ocho de la mañana cuando nos levantamos y nos duchamos, cada una por su lado. Bajamos a ver qué nos esperaba en el dinning room para desayunar.
Mmm, todo tenía una pinta... asquerosa. Encendí mi radar, tup, tup, tup, ¡objetivo localizado! Unos suculentos croissants y unos mini búlgaros todo dentro de su respectivo envoltorio de plástico. Decidí que toda esa bollería había que bajarla ayudada de un cafelito, así que con toda mi buena fe me lo eché de la máquina. Primero me lo acerqué a la nariz y es que a mi si no me gusta el olor no pasa a la boca, ya sabéis de nariz a boca no si la cosa huele mal.
Bueno aquello en principio no olió a nada y respecto al sabor pues seguramente sería lo más parecido a una infusión de guano en polvo... ¡puaj!
Tras poner cara de estonotienestucojonesdeprobarlo según el aspecto que adquirió mi amiga al verme me dispuse a comer toda esa pirámide no nutricional. Tras este indigesto desayuno nos dispusimos a coger las "meriendas" que se encargaban de proporcionarnos los del hotel, para nuestras excursiones. ¡Cuánta amabilidad!
La primera excursión del día fue un bonito viaje en autobús con unas treinta personas más, realmente el objetivo de la excursión era ir a la playa pero gracias a ese clima tan bonito de Mallorca se puso a llover así que cambiamos el trayecto, nos dirigimos a Manacor. Allí vimos no sé qué monumento y Tania, mi amiga, y yo nos escapamos por ahí a ver un poco más la ciudad. Vimos a gente de todo tipo, sobre todo a alemanes de todo tipo. Guapos, feos, altos, bajos, fuertes, canijos...
Cuando nuestros estómagos empezaron a rugir supimos que era el momento de degustar esa merienda preparada con tanto... ¡joder! Un paquete de galletas María (con 4 galletas), un bocadillo de ¿salchichón? y nada más. ¿Nos habría visto cara de anoréxicas? A ver, a mi la chacina no me agrada precisamente así que mi amiga, tan amable ella, me dio sus galletas y ese fue mi "mirienda". Al volver al hotel tenía más hambre que un perrillo chico así que iba decidida a atacar el almuerzo. Al final resultó ser al revés.
Buffet, había donde elegir o eso parecía. Había macarrones a la boloñesa con una pinta un poco rara, también había patatas y filetes, bueno y un pollo asado. Me serví un poco de macarrones y un mucho de papas y filetes. Ataqué el plato y tras un grito y un comentario poco educado hacía los cocineros, me acerqué al odio de mi amiga y con un leve susurro le pregunté: ¿Has visto a la vaca por aquí? Ella por supuesto me puso cara de dejalacocaniñanovescomoteafecta a lo que me expliqué mostrándole el cacho de filete que había cortado, con la sangre en su salsa. Crudo el filete y crudas las papas. El comentario sobre los macarrones me lo ahorraré.
Esa noche tocaba salida nocturna ¡al Pachá! Muy buen ambiente, buena música (por entonces tampoco se le podía pedir mucho) y muy buenos camareros, sí señor.
MARTES 8 JUNIO ,2004
Al día siguiente la monotonía se rompió en el desayuno ya que decidí que ese día no me moriría de hambre, así que metí todos los croissants y los búlgaros que cupieron en el bolso. La excursión de ese día se presentaba emocionante íbamos a Sa Calobra a ver las cuevas del Drach.
Durante el trayecto pasamos por la carretera denominada "nudo de la corbata" por la curva de 360º que forma, en la zona este de Mallorca. Las cuevas del Drach al final resultaron ser eso, un pedazo de piedra con un hueco para que puedas entrar y no veas más que piedra, polvo y gente señalando paredes donde no hay nada, seguramente para comentar la carencia de imágenes prehistóricas que aquel lugar padecía. Y es que eso no lo pisaría ni Bin Laden, una cueva mu' sosa. Compramos los regalitos oportunos (nada que ver con la cueva porque de allí no tienes que acordarte de nada), nos comimos la "mirienda", esta vez se habían ahorrado las galletas y lo habían cambiado por una manzana, tuve que comérmela pero no sin padecer vampirismo y es que me había dejado la encía en la manzana y la tenía toda sangrando; cuando nos reunimos todos vuelta al hotel. Llegamos a almorzar por los pelos, esta vez opté por atacar al pollo, me tocó le pollo anoréxico, medio pollo que me puse en el plato y no duró ni diez minutos. Por la tarde piscinita hasta que se puso a llover y de noche para la cena todavía seguía ahí el otro medio pollo, de postre unas patatuelas en la habitación. Esa noche tocaba cambiar de discoteca, esta vez le tocaba el turno a Tito's la discoteca donde haces de todo menos bailar y es que allí todo el mundo iba a meter mano y a rozar cebolleta. Salimos a disgusto de la disco y nos acostamos tempranito.
MIÉRCOLES 9 DE JUNIO, 2004
Vuelta a la rutina, más robo en la cocina. ESta vez la excursión fue a las cuevas del Hams a dos kilómetros al oeste de porto Cristo, la zona oeste de Mallorca. Esta vez vimos estalagmitas y estalactitas, además dimos un paseo en barca, en esa especia de balsa de agua de la cueva. Esta vez nos lo pasamos muy bien. A la tarde nos fuimos en un barco, donde nos dejaron parados a unos kilómetros de la costa para disfrutar del mar y es que la vista era fenomenal, el mar era cristalino y por algunas zonas tenía un tono verdoso impresionante y magnífico. Daban ganas de quedarse allí todo el día pero era hora de irnos y la vuelta al hotel fue un "momentazo Titanic", en la proa sintiendo el viento meciéndote el pelo y el agua refrescándote el alma. El resto de la tarde nos la pasamos de pingoneo por ahí. Al volver había un grupo de gente en la piscina (decidimos darnos un bañito) y al salir dirigiendo mi vista hacía ese grupo, alcé el brazo y mientras bajaba para azotarme el trasero dije con voz contundente y en un tono relativamente alto: "¡Dame Candelaaaa!". Por la noche tocaba volver a Pachá pero yo no tenía ganas así que mi amiga se fue sola y yo me quedé sola en el hotel, sola con mi soledad, con mis pensamientos... con la Luna.
JUEVES 10 DE JUNIO, 2004
Monotonía y más monotonía, para colmo esta vez la excursión era a una fábrica de collares de perlas, donde se daban un tratamiento especial a estas. A ponernos los dientes largos. A la vuelta pasamos por un sitio donde vendían cuero tratado a mano, con cosas elaboradas a mano, mucho chisme de cuero y de madera. Todo muy típico de Mallorca por supuesto.
Más comida basura. Más basura de comida. Por la tarde playa, esta vez sí que sí, no había ni mucha humedad ni peligro inminente de lluvia. La arena era blanca y se quitaba muy bien del cuerpo. Además el agua estaba calentita pero para que te cubriera tenías que andar bastante. Fue una buena tarde, entre el cachondeo con la pelotita y el par de chavales a nuestro lado fumándose unos porros (sí, fueron más de uno). Durante esta tarde se nos ocurrió la versión "¡toma moreno!" de nuestro grito de batalla. Acabada la tarde tocaba irse a la camita.
VIERNES 11 DE JUNIO, 2004
Zzzz... ¡Ups! Perdón. ¿Por dónde iba?... Ah! sí, ya me acuerdo. Bueno pues después de la monotonía mañanera por la tarde nos llevaron a un submarino, uno puerquecillo claro. Nos sumergimos (nosotras y unos 2o giris más) unos treinta metros y un par de buceadores se dedicaron a echarle comida a los peces por donde estaban las ventanas para que nosotros (oh! pobres turistas) pudiésemos verlo. Acabamos reventadas y lo único que nos apetecía era ir a dormir. Otro día más que se acababa.
SÁBADO 12 DE JUNIO, 2004
Esta vez tuvimos que madrugar y mucho, nos levantamos a las cuatro de la madrugada a esperar el autobús que vendría a recogernos para llevarnos al aeropuerto. Estuvimos contando chistes riéndonos de los que se quedaban dormidos durante la espera, etc. Antes de irnos, el director nos llamó la atención y no quise irme sin antes dedicarle un: ¡Dame caña! ¡arf arf! (con coreografía incluida). Ya de vuelta en el avión el dolor de mis oidos era insoportable por lo que no puede ni siquiera pensar en lo que había dejado atrás, en lo que me esperaba y en si mi amiga se lo había pasado bien. La verdad es que la felicidad que sentía me hacía ignorar todo aquello.
VIERNES 13 DE JUNIO, 2008
Me he levantado, he ido al trabajo y he vuelto con la idea de escribir mi experiencia en un libro. Dejar un recuerdo imborrable, permanente. Ahora tengo que vestirme pronto, la maquilladora vendrá enseguida y el padrino esta gritándome que no piense en escaparme ni en dejar notitas raras. Hoy casi cuatro años después me caso, mi amiga murió en un accidente de coche el año pasado pero por ella escojo este día, por ser trece y por hacer cuatro años y un día que pasamos los mejores cinco días de nuestra vida.
Y ahora os dejo que tengo que asistir a una boda, vuestra amiga Irene.
3 comentarios:
Muy rico. Se conoce que han habido modificaciones pero igualmente trae recuerdos XD.
A ver, es un relato eso lo primero, fíjate en la etiqueta y lo segundo "doña soy la juerga padre", no es por ti, que si no preguntamos no es culpa mía.
Publicar un comentario